EL BECERRO DE ORO
Exodo 32
Asì como Adàn
desobedece desde el principio, tambièn el pueblo de Israel despuès
de recibir los Diez Mandamientos. Los israelitas no han aceptado totalmente
a Dios, y quieren volver a sus antiguas costumbres en Egipto, que solamente
pedìa fiestas y ritos. El becerro que fabrican, con madera cubierta
de oro (por eso Moisès lo quemarà) es un dios falso construido
por el pueblo. El pecado de los israelitas no es solamente por haber fabricado
un ìdolo al que adoraràn, sino tambièn por hacerse un
dios a su conveniencia.
Al bajar Moisès del Monte Sinaì se escuchan las
excusas de Aaròn, que echa la culpa al pueblo. Recordemos que solamente
existe un sòlo Dios verdadero. El pecado de idolatrìa es un
pecado muy grave. Nuestros ìdolos pueden ser el dinero, la moda, el
sexo, el internet, la televisiòn, la comida y muchas cosas màs,
cuando no sabemos darle un uso adecuado y no los sabemos utilizar cuando
se debe.